Más perdido que poroto en paila marina...  

El desatino editorial del periodista puntarenense, en lo que concierne a Natales, no le permite o no quiere ver que, cuando te subes al carro del discurso poco riguroso y analítico, terminas cayendo en consignas como las que repite el otro periodista articulista asociado al mismo medio al que nos referimos y que proviene de Argentina y el cual se ha encargado desde hace varios meses y sistemáticamente de esparcir un discurso tremendista, del miedo y que nada funciona en Natales.

Contra todo eso, sí, Natales está bonito este verano, el turismo se ha incrementado notoriamente; contra todo, la pesca artesanal va caminando paso a paso, un poco mejor, ya se ven avances en las preparaciones de faenas y en lo que al recurso Luga se refiere.

Contra las fake news y distorsiones que provienen de un aparato que no da tregua en contra de la alcaldía de Natales, no hay miles de cesantes pululando por las calles de la ciudad, tal cual  quiso instalar este poderoso aparato de desinformación junto a la consigna amarilla y malintencionada.   Y contra eso, se avanza en los proyectos municipales y públicos. Hay avances y son evidentes.

Que se pudo haber ido más rápido en cuanto a proyectos, sí, siempre se puede ir más rápido, pero la rapidez no implica que las cosas se hagan con la dedicación y calidad que se requiere. Y convengamos que la odiada burocracia y tramitaciones  tienen sus tiempos  que no son los de la gente, pero hay que darlo por descontado.

Por último, el editorialista se equivoca y rotundamente, cuando en el último párrafo referido a Natales, emite un juicio contrario a la actual administracion municipal de Natales. La peor administración que se tenga memoria en Natales es la del alcalde procesado ("el alcalde cemento"), la de él y el de su secuaz que tenía instalado en la CORMUNAT. Y aquí no hay dobles lecturas, por que la ciudadanía natalina ya se pronunció sobre este tema y no va a venir a cambiar la historia ahora un editorialista de Punta Arenas, asesorado por un periodista que vivió en Argentina y que anda más perdido que poroto en paila marina...