El Golpe de estado no convencional que se realizó tocando cacerolas
Era golpe de estado, pero el presidente comía pizza en un restaurant. Tratar de reescribir la historia con frasecitas para la galería republicana es francamente irresponsable por aquella derecha que se proclama democrática.
En La primavera del 2019 los jóvenes despertaron a este país, algún día la historia hablará sobre ellos.
Primero hay que dejar muy claro que, sin el estallido social, no hubiese existido el plebiscito del 25 de octubre con el objeto de determinar si la ciudadanía estaba de acuerdo con iniciar un proceso constituyente para redactar una nueva Constitución, y determinar el mecanismo para dicho proceso, y tampoco hubiese existido el plebiscito constitucional de Chile de 2022, referéndum desarrollado el domingo 4 de septiembre con objeto de determinar si la ciudadanía estaba de acuerdo con la propuesta de Constitución Política de la República redactada por la Convención Constitucional, por lo que también era conocido como «plebiscito de salida» donde triunfó él rechazo a la propuesta constitucional, posteriormente las fuerzas políticas acordaron continuar el proceso para la creación de una nueva constitución.
Ahora vamos a explicar cómo se llega al proceso de cambio de constitución.
Todo comenzó como una queja contra el alza en el precio del pasaje del Metro, pero se convirtió en un clamor popular por un modelo socioeconómico más justo. Se cumplieron 4 años desde que estallara la crisis social más grave desde el retorno a la democracia en Chile, que se saldó con históricas manifestaciones que se desarrollaron en Santiago y en otras ciudades del país, además de episodios donde hubo represión, saqueos e incendios, y una treintena de muertos y miles de heridos.
¿Qué sucedió en la provincia de Ultima Esperanza?
Desde el día después del inicio del estallido social fueron los jóvenes los que comenzaron a escribir la historia en las calles de Puerto Natales. Ellos convocaron las primeras movilizaciones. La plaza de armas de la ciudad se convirtió en un sitio que fue tomada por la cultura, allí llegaban los más diversos grupos musicales que fueron convocados por una nueva banda de Rock que se llamaba “Retrov”, ellos llevaban sus equipos los conectaban y los compartían con los demás músicos, el ambiente que había en esa plaza era mágico, todos llevaban algo y lo compartían con la gente, había cuenta cuentos, títeres, parvularias que cuidaban a los niños, pintores que realizaban un mural, trueque, intercambio de libros, mientras desde los parlantes surgía la música se desarrollaban asambleas veíamos todo ese paisaje y sentíamos que nos invitaba a creer en un nuevo mundo, en uno más diverso, más justo.
En las noches desde esa plaza se salía a marchar por las calles de Natales (esas marchas eran convocadas por jóvenes), la lógica que imperaba es la de que “Solo el pueblo ayuda al pueblo”, todo se auto gestionaba. El punto de reunión para el pueblo fue esa plaza que durante varios días fue un símbolo que ayudó a sumar más gente al movimiento social. También es necesario señalar el rol protagónico que asumieron las mujeres en este estallido popular, ellas entregaron su lucidez a la lucha.
Durante esas jornadas había una energía extraña en el aire, habíamos recuperado la esperanza, eso se sentía.
Eran días en que sufrimos persecución, sentimos rabia, miedo, alegría, pero de una u otra forma se estaba construyendo otra realidad, sabíamos que en el norte de Chile el pueblo era fuertemente reprimido y eso nos molestaba, pero al fin nuestra ciudadanía despertó de los abusos de este cruel sistema. Un modelo que fue impuesto a sangre y fuego por la dictadura cívico militar el año 1973, que se profundizó con la constitución del 80. Un modelo que logra un pacto con las fuerzas opositoras y que se mantiene intacto durante los gobiernos democráticos, “no eran 30 pesos eran 30 años” gritó el pueblo y tenían razón.
Una de las cosas que debemos de tener clara es que sin el estallido social no hubiese existido el proceso constitucional.
El Golpe de estado no convencional que se realizó tocando cacerolas hace 4 años en nuestro país, la derecha inventa el relato del golpe de estado no tradicional para tratar de minimizar las violaciones de derechos humanos y la represión de parte del estado al pueblo de Chile.
Tratan de minimizar el estallido social producto de la indignación popular y también minimizar los 50 años del golpe de estado cívico militar.
La derecha quiere instalar la posverdad del golpe de estado no convencional, pero ellos crean un relato a partir de noticas falsas y desde la posverdad desde hace décadas y el pueblo consume toda esa lógica.
Por: Juan Salvador Miranda V.